Garras y colmillos: Asterión (el minotauro de Creta).

Un ser monstruoso con la cornamenta de un toro, nacido de una relación zofilica por el castigo de un dios enfurecido y una de las bestias más temidas de la antigüedad, la cual debía de comer a 14 jóvenes anualmente para saciar su hambre.

El minotauro es un híbrido mitad hombre mitad toro (en realidad tiene la cabeza de toro y el cuerpo de humano) perteneciente a la mitología griega, este ser nació de la relación zoofilica de Pasífae y el toro de Creta (toro regalado por Poseidón al rey Minos, esposo de persífae). El aspecto del monstruo es muy conocido para todos, ya que su imagen e historia se ha usado en muchas novelas, películas, series e incluso videojuegos.

Minotauro: aspecto y características.

Son monstruos con cabeza y cola de toro, musculoso (por lo tanto con gran fuerza física), se rigen más por instinto que por la razón, por lo que no son muy inteligentes, aunque tienen los sentidos de un depredador (olfato, audición y visión) más desarrollados que un hombre normal. Su forma de ataque favorito es la envestida, pero puede hacer uso de las mordeduras o con algún instrumento bélico. El arma más usada por estas bestias son los mazos o las hachas.

Los minotauros son siempre machos, su promedio de vida ronda los 200 años. Gustan de robar doncellas para procrear con ellas. Su alimentación es carnívora prefiriendo la carne humana. Hablando específicamente de Asterión, para saciar su hambre se le tenía que rendir un tributo anual, el cual consistía en 7 mujeres y 7 hombres jóvenes vírgenes a los que se internaba en el laberinto de Creta (“hogar” del minotauro).

Promesa, castigo y zoofilia.

Se cuenta en las tradiciones griegas que el rey Minos prometió hacer un gran sacrificio para el dios del mar, entonces Poseidón le envión desde los océanos a un hermoso toro blanco, el cual debería ser sacrificado en honor al mismo dios. Cuando el rey vio al semental se quedó maravillado por su porte y decidió conservarlo para que dejase descendencia en su rebaño. Entonces para cumplir su promesa sacrifico al mejor toro que tenía, aunque este no se comparaba en nada al toro de creta.

Cuando el dios de los mares y océanos se enteró del engaño hizo que la bella esposa de Minos, Pasífae, se enamorara perdidamente del toro y tuviera fuertes deseos de ser poseída por el animal. Debido a las diferencias de ambos seres, la reina de creta hizo que Dédalo (artesano y arquitecto que había sido desterrado de Grecia) fabricase una estructura de madera similar a una vaca, la cual fue recubierta con piel de este animal y donde podía introducirse la reina.

Cuando el invento estuvo terminado Dédalo condujo al toro hasta la vaca falsa y el animal sin darse cuenta de que no era real copulo con ella y a la vez con la reina quien permanecía dentro de la falsa vaca. Después de esto nació el horrible minotauro, conforme iba creciendo esta bestia se hacía más voraz y salvaje. El monstruo era antropófago (consumía carne humana) por lo que se le daban como aperitivos a los prisioneros de guerra o esclavos que ya no podían con sus funciones.

¿Cómo contener a una bestia come hombres?

Cuando el minotauro creció del todo y su hambre se hizo prácticamente insaciable, el rey recurrió a Dédalo para que hiciese una prisión que pudiera contener al monstruo, el artesano, sabiendo que no había forma de retener a Asterión en una prisión de cuatro paredes, ideo construir un laberinto del que ni el propio minotauro pudiese salir. El laberinto era una estructura interminable de pasillos que se entrecruzaban entre si y de los cuales solo uno daba al centro, lugar donde permanecía el temido monstruo.

La guerra y los tributos.

Cuando Creta gano la guerra con Atenas (desencadenada por el asesinato de Androgeo, uno de los hijos de Minos, tras ganar las olimpiadas), los atenienses fueron obligados a pagar un tributo anual de 7 doncellas y 7 jóvenes para ser devorados por el minotauro. Se dice que este tributo fue sugerido por el oráculo de Delfos. En otras versiones del mito se menciona que los sacrificios se ofrecían cada nueve años.

La llegada del héroe.

Cuando Teseo se enteró de los sacrificios que se le ofrecían al monstruo de Creta se ofreció el mismo para ser parte del sacrificio, sabiendo que podría vencer fácilmente a la bestia. Otras versiones del mito dicen que el propio Minos escogía a los jóvenes que serían sacrificados, y al ver el gran amor que tenía el rey Egeo (9° rey de Atenas y padre de Teseo) hacia el joven, quiso que lo devorara el minotauro, pues de esa forma su enemigo sentiría lo mismo que él al perder a su hijo.

Amor a primera vista.

Cuando Teseo llego a la isla, la hija de Minos, Ariadna se enamoró del joven héroe, la bella princesa trato de detener a Teseo pues sabía que la bestia lo mataría como a todo aquel que entraba en el laberinto, pero el ateniense le contó sus proezas. Sin embargo había un problema más grande, si Teseo conseguía matar al minotauro no podría salir del laberinto ya que era extremadamente complicado, así que Ariadna se puso a buscar la solución más adecuada.

Para lograrlo la joven princesa le pidió a Dédalo que le mostrase el camino para salir del laberinto. El arquitecto entonces le dijo que la única manera de salir era usando un carrete u ovillo de hilo, uno de los extremos de este debía ser atado en la entrada del laberinto y cuando el héroe se dispusiera a regresar, solo debía enrollar el hilo conforme caminara y así encontraría de nueva cuenta el lugar por donde había entrado.

La muerte de Asterión.

Como en todo mito antiguo, los cuales se trasmitieron regularmente de forma oral, este tiene varias versiones en cuanto a la muerte del monstruo. En algunos se dice que Teseo lucho a puño limpio con el minotauro, engrandeciendo en gran medida al héroe ya que como dije antes la criatura del laberinto era muy fuerte, resistente y peligrosa. Otras fuentes aseguran que el hijo de Egeo se enfrentó a la bestia con una espada, la cual se la había dado Ariadna junto con el ovillo. Después de matar al monstruo Teseo siguió el plan de dédalo y encontró la salida.